
Astrocitomas: Causas, síntomas, pruebas y tratamiento con fisioterapia
Los astrocitos con forma de estrella son células gliales (el tipo de células que proporcionan los tejidos de soporte del cerebro). Los astrocitomas son tumores que crecen a partir de estas células y que se encuentran en el sistema nervioso central.
¿Cómo ayuda la fisioterapia con un astrocitoma?

¿Qué es un astrocitoma?
Los astrocitomas son tumores que se encuentran en el sistema nervioso central (SNC) y que crecen a partir de células astrocitarias con forma de estrella. Los astrocitos son células gliales (el tipo de células que proporcionan tejido de soporte en el cerebro).
Algunos tipos de astrocitomas tienen pequeñas áreas de infiltración, mientras que otros están más extendidos. Hay varios tipos de astrocitomas, entre ellos:
- Pilocíticas: Tienden a no extenderse y se consideran no cancerosas.
- Difusos: Crecen lentamente.
- Anaplásico: Son raros pero requieren un tratamiento agresivo.
- Glioblastoma: Este tipo crece agresivamente y es el tumor cerebral primario canceroso más común.
- Astrocitoma subependimal de células gigantes: Este tipo está relacionado con la esclerosis tuberosa, una enfermedad genética.
¿Dónde se encuentran los astrocitomas con más frecuencia?
La mayoría de estos tumores se encuentran en la curva exterior del cerebro. A menudo, se encuentran en la parte superior del cerebro. A veces, pueden desarrollarse en la base del cerebro. Los astrocitomas que se encuentran en el tronco cerebral o en la médula espinal son menos frecuentes.
¿Quién corre el riesgo de desarrollar astrocitomas?
La tasa de incidencia media anual ajustada por edad de los tumores del tejido neuroepitelial (que incluye los astrocitomas) es de 6,6 por cada 100.000, según cifras del Registro Central de Tumores Cerebrales de Europa en 2016.
La mayoría de los casos de astrocitomas pilocíticos se diagnostican antes de los 20 años. En Europa, unas 1.200 personas menores de 19 años tendrán un diagnóstico de astrocitoma. El grupo de edad de 20 a 45 años representa aproximadamente el 60% de todos los diagnósticos de astrocitoma de bajo grado. En algunos casos se ha encontrado un componente genético. Los varones tienen una probabilidad ligeramente mayor de desarrollar astrocitomas que las mujeres.
Los glioblastomas suelen aparecer cuando las personas tienen entre 50 y 60 años. El número de diagnósticos en Europa se estima en 10.000 casos al año.

¿Cuáles son las causas de los astrocitomas?
No conocemos la causa exacta de la mayoría de los astrocitomas. La irradiación terapéutica puede conducir al desarrollo de astrocitomas. Aunque se sospecha de otras exposiciones ambientales, no se ha demostrado que causen astrocitomas. Algunos estudios han demostrado la existencia de un componente genético en algunos casos.
¿Cuáles son los síntomas de los astrocitomas?
Los síntomas están relacionados con el tamaño y la localización del astrocitoma. Los síntomas más comunes son:
- Dolores de cabeza
- Náuseas y vómitos
- Pérdida de memoria
- Convulsiones
- Cambios en el estado mental
- Fatiga
- Problemas visuales
- Otras alteraciones cognitivas y motoras
El aumento de la presión intracraneal puede provocar reflejos anormales o debilidad en un lado del cuerpo.
¿Cómo se diagnostican los astrocitomas?
El diagnóstico de los astrocitomas puede ser difícil debido a que los síntomas son similares a los de otros trastornos neurológicos. Se pueden realizar algunas pruebas de laboratorio, como un recuento sanguíneo completo , un perfil metabólico básico y tiempos de coagulación de la sangre, pero suelen ser normales. Las pruebas radiológicas se utilizan para diagnosticar los astrocitomas.
¿Qué pruebas se utilizan para diagnosticar los astrocitomas?
La resonancia magnética (RM) es el estudio estándar. La tomografía computarizada (TC) puede utilizarse si el paciente no puede someterse a una RMN. Otras pruebas son:
- Angiografía
- Tomografía por emisión de positrones (PET)
- Electroencefalografía (EEG)
- Electrocardiogramas (ECG)
- Radiografías de tórax
- Estudios del líquido cefalorraquídeo
Se puede realizar una biopsia para determinar un diagnóstico definitivo.

¿Cómo se gestionan y tratan los astrocitomas?
Las decisiones sobre el tratamiento de los astrocitomas pueden tomarse con la aportación de especialistas, como neurólogos, neurocirujanos, radiooncólogos y oncólogos médicos. Los tratamientos incluyen cirugía, radioterapia, quimioterapia y campos eléctricos terapéuticos.
Los tratamientos quirúrgicos incluyen biopsias, ablación con láser y resecciones tumorales. Se pueden colocar drenajes para disminuir la presión intracraneal. Para los tumores de alto riesgo se suele prescribir radiación y/o quimioterapia. Los campos eléctricos para tratar los tumores también pueden ser beneficiosos en algunos casos.
El médico puede considerar que la mejor estrategia de tratamiento es que los pacientes participen en ensayos clínicos, cuando estén disponibles. La estadificación de los astrocitomas no suele hacerse porque es raro que crezcan fuera del cerebro. Una persona en tratamiento por astrocitoma puede necesitar también fisioterapia y/o terapia ocupacional.
¿Cómo es el tratamiento de fisioterapia para un astrocitoma?
- de grado III
- La fisioterapia puede ayudar a aliviar el dolor y la rigidez en las articulaciones.
- También puede ayudar a mejorar la fuerza muscular y la capacidad de movimiento.
- La fisioterapia también puede ayudar a reducir el edema (hinchazón) en las extremidades.
- Puede haber ejercicios específicos que el fisioterapeuta pueda recomendar para cada paciente, dependiendo de su condición.
¿Existen restricciones para una persona con un astrocitoma?
Las restricciones se basarán en la localización del astrocitoma y en el alcance de los síntomas. Por ejemplo, si los astrocitomas provocan convulsiones, puede estar prohibido conducir. Sin embargo, no son necesarias otras restricciones generales de actividad.
¿Qué cuidados adicionales pueden ser necesarios?
Pueden ser necesarias citas de seguimiento con neurólogos, oncólogos médicos, oncólogos radioterápicos y neurocirujanos. La irradiación y la quimioterapia pueden continuar, y a menudo es necesario realizar pruebas de seguimiento, como resonancias magnéticas adicionales.
¿Cuál es el pronóstico de un astrocitoma?
El pronóstico puede variar según el tipo y la localización del astrocitoma. Por ejemplo, los pacientes con un glioblastoma pueden tener una tasa de supervivencia inferior a un año, aunque algunos pacientes pueden vivir cinco años o más. Los pacientes con un astrocitoma pilocítico pueden tener una tasa de supervivencia de unos diez años. Si se consigue la remisión, ésta puede ser permanente o temporal.